No olvides que todo en tu vida tiene el sentido que tú le quieras conferir, porque en esencia, nada lo tiene. Si apartaras tu necesidad de darle sentido y atención a las cosas, si dejaras de atender a los pensamientos que te bombardean continuamente desde que te despiertas hasta que te acuestas, podrías darte cuenta de que todo el sentido que le confieres al mundo, nace de la mente (que es el ego, la programación inconsciente) en su necesidad de existir como entidad separada y proyecta tu cuerpo, tu mundo, tus experiencias.
Es muy interesante poder observar en mi experiencia, que conforme voy profundizando en mi, a través de las prácticas espirituales, e indicaciones de maestros realizados como Robert Adams o Ramana Maharshi, voy dándome cuenta de que todo lo que percibo nace de una necesidad externa a mi, es como si el mundo y sus imágenes, tratara de tener una importancia que solo yo pudiera hacer real a través de mi atención.
Conforme y progresivamente voy profundizando en mi proceso de sumergirme y reconocerme por lo que realmente soy, voy sintiendo más libertad, más alegría, pero una alegría pasiva, observadora, casi podría decir, seria, y esto da lugar a un sentirme más desapasionado de los resultados, de la necesidad de defenderme, de ese querer tener razón, para simplemente mantenerme en paz. Lo más curioso es, que no hay nada que se esfuerce porque esto ocurra, se da por sí mismo.
Me doy cuenta y te comparto, que conforme realizo mi propio camino de recordar quien realmente soy y autodescubrirme, todo va perdiendo el sentido que años atrás le daba con tanta fuerza. El programa, o el ego, o llámale como prefieras, va perdiendo intensidad y se va estableciendo un estado de calma, de aceptación, de serenidad que es difícil expresar con palabras.
En mi experiencia, he descubierto que lo más importante es no aprender de memoria lo que otros dicen o indican e ir repitiendo por ahí como un loro y vivir tu propia experiencia, pero esto precisa de práctica y de amor por descubrir la verdad que reside en tu corazón.
En mi proceso, me doy cuenta, de que lo más importante es dejar atrás todo lo que te han contado, todo lo que has aprendido y priorizar en la práctica sumergiéndote internamente, girando la atención hacía adentro, hacía eso que en ti es el atendedor de los fenómenos, consciente y testigo, y simplemente quedarte ahí, sin hacer nada más que ser.
Muchas personas, absorbidas por el mundo y sus fenómenos, han olvidado lo que realmente son, y esto conlleva a un gran sufrimiento, a una gran culpa por sentirse incoherentemente separadas de su esencia, lo conozco. Se que este camino es una vía que solo la gracia, el destino, Dios o como prefieras llamarlo, dispone en tu experiencia de vida para que despiertes, pero si lees estas palabras, se que está llegando tu momento y que será lo mejor que te pueda pasar.
Nadie dijo que fuera fácil, requiere de constancia, paciencia, amor, fe y sobre todo inquietud profunda por descubrir lo que realmente eres.
Si quieres realizar conmigo este camino, estoy a tu servicio para compartirte todas las indicaciones, herramientas y experiencia que he podido realizar en los años que llevo en mi proceso de descubrir quien soy realmente.
Porque se trata de descubrirlo y no creerte nada de nadie, se trata de descubrirte a ti mismo, vivir tu propia experiencia y estoy aquí para ti.
Te mando un abrazo de todo corazón y te deseo un feliz nuevo ciclo para este año llamado 2021.
Si quieres que te acompañe y te comparta todo lo que hasta ahora he podido experimentar contáctame.